miércoles, 22 de agosto de 2012

7 cocos para 7 puntos


Muchas veces nos enfrentamos a problemas ambiguos que no sabemos resolver. Normalmente lo que hacemos si tenemos la oportunidad es fijarnos en cómo lo hacen los demás. Por ejemplo, llegamos a un sitio nuevo donde no sabemos cómo comportarnos y observamos cómo lo hace el resto de personas para imitarlos. Vamos, el típico, "allá donde fueres, haz lo que vieres". A esto se le llama influencia informativa. Utilizar la información que tengo del resto para solucionar el problema al que me enfrento.

En 1935, el psicólogo Muzafer Sheriff, intentó mostrar cómo esta influencia informativa puede conseguir una cristalización de la norma (es decir, que las cosas se hagan así, porque así se ha estipulado).  Para ello, se sirvió de una ilusión ótpica conocida como "punto autocinético". Consiste en que, en una habitación completamente a oscuras, se proyecta un punto de luz fijo. Al estar todo completamente oscuro no se tiene referente de ningún objeto y al mirarlo fijamente, parece que el punto se mueve solo.


Lo que se les pedía a los participantes era que juzgaran la cantidad de movimiento que ese punto tenía. Al principio, lo juicios individuales eran muy diferentes de unos a otros individuos, pero después los pusieron a todos juntos a decir sus valoraciones en voz alta en grupo. Sus estimaciones empezaron a coincidir. Empezaron a ver el punto moverse con la misma dirección y amplitud. Después se volvieron a separar y cada uno de manera individual tenía que volver a valorar el movimiento del punto. De nuevo, todos coincidieron siguiendo la norma que el grupo había establecido previamente.

Un año después, volvieron a juntarlos a todos,  y observaron que el patrón de movimiento era el mismo que un año atrás. Fueron cambiando a un participante cada vez, repitiendo las sesiones, hasta que todos los participantes fueron nuevos. La norma autocinética permaneció siendo verdadera para aquél que la transmitió a través de generaciones sucesivas, de modo que  los participantes nuevos que no habían formado parte de la "creación de la norma" estaban de acuerdo con el movimiento del punto que el grupo describía.

Esto vuelve a ser un ejemplo de cómo actuamos porque siempre se ha actuado así. Vemos cómo las "reglas de la vida" pasan de generación en generación. Si recordáis la entrada Coco mono, pasaba algo parecido. ¿Tendrá algo que ver que tenemos asumido que "la unión hace la fuerza" y que "tres cabezas piensan mejor que una"?

¡Venga, dadle al coco!

Fuente: Libro: Psicología y vida, Richard J. Gerrig, Philip G. Zimbardo.  http://books.google.es/books?id=3-I4Z1dAxo0C&pg=PA577&lpg=PA577&dq=punto+autocin%C3%A9tico+sheriff&source=bl&ots=FiaA3wcI_G&sig=lcbA2hkR_rwi5nMmBkAkBvdLmz8&hl=es&sa=X&ei=-VwSUOXfBMKL0AWu7oHgCw&ved=0CGIQ6AEwBA#v=onepage&q=punto%20autocin%C3%A9tico%20sheriff&f=true

6 comentarios:

  1. "Cristalización de la norma", me ha encantado. Cuando la gente dice lo de "como dios manda" es un poco esto también no?

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  2. Hacer las cosas como "Dios manda" puede ser, efectivamente, un modo de verbalizar el hecho de que "las cosas se hacen así y punto". El hecho de que una norma se cristalice no es más que una repetición de una actividad, duradera en el tiempo, que no plantea conflictos entre ninguna de las partes y que, por tanto, no es necesario el planteamiento de una norma alternativa.
    La cosa cambia cuando surge disconformidad con la norma y se empiezan a buscar otras vías posibles. Pero cuando nos encontramos, como en el caso de este experimento, un problema que no tiene solución o, mejor dicho, que tiene múltiples soluciones correctas, y del cual no tenemos ninguna concepción previa, nos servimos de la opinión de los demás para formar la nuestra. Si os dais cuenta, en el caso de ir a un restaurante nuevo con una amplia carta de platos, con gente del trabajo con la que no tienes mucha confianza, el resultado suele ser que se repiten los mismos dos o tres platos de toda la carta. Ante la falta de experiencia previa, me fio de lo que los otros hacen y yo lo imito. Es posiblemente una estrategia de afrontamiento para pasar desapercibido en situaciones sobre las que no tenemos control.

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  3. Estoy totalmente de acuerdo en lo que se llama influencia informativa y en que todos solemos imitar a otros cuando nos enfrentamos a una situación nueva. El experimento efectuado por Muzafer Sheriff lo confirma, ya que todos los participantes se apoyaron unos en otros y coincidieron en sus apreciaciones convirtiéndolo en norma para los futuros participantes del experimento. Dicha norma pasó de generación en generación. A lo largo de la vida hemos aprendido cosas de esta manera imitando y apoyándonos en los demás, sobre todo, cuando se nos presenta una situación nueva.


    Ana Puig

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  4. En este caso la influencia informativa nos sirve de gran ayuda a todos. Hay como una regla de "no puedes hacer el ridículo". Esta regla hace que te fijes en los demás e imites el comportamiento en cada lugar. Pero claro, ¿quién marca las pautas de esos comportamientos? Pues bien las marcamos entre todos y siempre desde lo más alto a lo más bajo, quiero decir que siempre lo que tienen más poder adquisitivo marcas los comportamientos, desde hace ya muchos siglos atrás.
    Las clases sociales, el estilo de ropa, la música que te guste, etc. todo influye y hace que nos movamos en ambientes diferentes.
    Es algo que siempre existirá por la razón de no encajar en el lugar que quieres.

    Un saludo
    Rosa María Pericacho.

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  5. Siempre he pensado que en ocasiones nos fijamos en los demás ante situaciones de desconcierto, y después de este ejemplo, aun estoy más convencida.
    Es inevitable, que ante uhna situación de duda o inseguridad, recurramos a una fuente. En este caso lo que hay alrededor, los seres humanos. Por ello, siempre que dudemos sobre algo, y otro "coco" nos muestre su opinión, también la compartiremos de la misma manera.

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  6. Un claro ejemplo de influencia informativa es la sociedad actual en la que vivimos. Ya que el ser humano por naturaleza parece que siempre se debe de sentir acompañado, siendo una oveja más del rebaño y dejándose llevar por el perro, es decir, por las normas de la sociedad que establecen las personas con un mayor poder adquisitivo.

    Un término que se podría relacionar con la influencia informativa es el miedo. El miedo que sentimos las personas a no ser aceptadas por otras, a quedarse solas y a ser la "oveja negra" del grupo. Y eso es así, la pura realidad, en la que las personas que tienen la valentía de no importarles lo que piensan tienden a ser las más excluidas del grupo y las etiquetadas como "los raros de la sociedad".

    Un saludo
    Belén Micó

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